ladius
Provincia del Imperio de Akenar
Su señoría, Lord Ormon, Señor de Gladius
Capital: Castillo de Altus (960)
Población: 90.000
Etnos: 80% enanos, 20% arcanos.
Recursos: hierro, piedra, pieles, gemas.
Idiomas: Enano, Común.
Desde finales del siglo III DS, Gladius pertenece al Imperio de Akenar. La mayor
parte de estas tierras está ocupada por las Montañas de Glades, una inmensa
cordillera de picos nevados jamás alcanzados por el hombre. En las tierras altas
hay también lagos y bosques fríos a los que se puede llegar en primavera o
verano.
Las Montañas de Glades llevan el nombre del dragón que habita en ellas. Cuentan
las leyendas que en el interior de las montañas vive una bestia alada que,
cuando los vilonios intentaron cruzar estas montañas, los expulsó. Dice también
la leyenda que Glades duerme miles de años, no se sabe cuándo despertará ni
siquiera si es real. Lo que sí parece cierto es que algunos montañeses juran
haber avistado alguna forma alada sobrevolando las cimas de los montes, lo cual
llena de pavor a las gentes de la región y atrae a algunos viajeros y buscadores
de tesoros.
Incluso aparte de las leyendas y pese a las riquezas mineras de la región, pocos
son los nobles que desean los feudos de alta montaña. Los castillos de las
laderas de los montes suelen ser bastiones dedicados a defender los valles de
las bestias salvajes –no necesitan ser legendarias, las reales ya son peligrosas
de por si- que puedan salir de las montañas o de debajo de las mismas, puesto
que abundan las simas y las cuevas de gran tamaño. No es la primera vez que
aparecen formaciones de gemas en cuevas profundas, esto también atrae a viajeros
y buscadores de tesoros, muchos de los cuales se pierden en las montañas y jamás
se vuelve a saber de ellos. En la ladera sur de la cordillera, también son
codiciadas las tumbas de los desaparecidos irelios, que solían enterrar en
túmulos a sus muertos con armas y oro. Las más conocidas hace siglos que fueron
saqueadas, pero de vez en cuando se encuentra alguna que había pasado
desapercibida a los ojos de la codicia.
En las montañas hay pastores y montañeses que viven de las cabras y los frutos
silvestres. Hay algunas aldeas en las tierras altas y varias poblaciones enanas
prácticamente subterráneas. A lo largo de los siglos se fueron haciendo calzadas
imperiales y caminos por los montes, pero resulta imposible cruzarlos de norte a
sur, sólo se pueden bordear por Dortoña, al este, o cruzar por los pasos de Erk,
al oeste.
En la región los carros siempre están tirados por bueyes, que aguantan mejor las
condiciones de montaña que los caballos. Hay refugios de montaña para
exploradores y viajeros, aunque generalmente en invierno es muy difícil cruzar
la región y la mayor parte de los asentamientos de montaña se quedan aislados.
En las montañas se ha extendido el uso del silbido para
comunicarse entre las simas, de manera que los pastores pueden darse avisos a
largas distancias. Los monasterios en esta parte de las montañas son menos
frecuentes que en Erk, puesto que son algo más peligrosas.
Las tropas en Gladius son siempre guarniciones feudales formadas por infantería
y arqueros, poco numerosa. Apenas hay caballeros en la región, y la mayor parte
de los feudos están mandados por nobles de bajo rango o segundones. El propio
duque reside en un castillo de tamaño modesto que vigila la ruta de las
caravanas de hierro hacia Dortoña.